El humor de la serie sigue siendo el mismo: una escena en el restaurante, una que otra referencia a lo que está pasando hoy en día y algún chiste con doble sentido. Lo cual puede parecer repetitivo, pero a mí me sigue haciendo explotar de risa.
Si hay algo que extrañaba desde que la serie terminó en mayo eran los comentarios sarcásticos de Max, los cuales nunca me decepcionan y en este capítulo hubo algunos que hicieron que pausara el episodio para reírme y no perderme de nada.
Sé que para algunos el humor de esta serie es demasiado sucio y no muy apropiado, pero eso es precisamente lo que lo hace gracioso, escuchar chistes tan sucios, pero tan bien cuidados que no se puede decir que sean precisamente explícitos, ya que hay que utilizar demasiado nuestra "mente sucia" para llegar a entenderlos; aun así debemos aceptar que una vez que lo entendemos no podemos parar de reírnos.
Y bueno, ¿qué más se puede decir? las chicas volvieron a empezar desde cero con su "contador financiero" (el que sale al final), pero esta vez la meta de los $2500 se ve alcanzable, claro está que a lo largo de la temporada tendrán que usar dinero de ese fondo para afrontar algún gasto (así se aseguran la duración de la serie) y bueno, nos entretendremos con ese sonido de la caja registradora que nos avisa cuando dinero poseen ahora. ¿O soy yo el único que lleva las cuentas semana a semana de lo que ellas gastan y ganan?
En fin, si no les molestan los chistes con doble sentido, son de "estómago fuerte" y consideran su humor un poco negro, les recomiendo la serie, les aseguro que se van a reír y entretener por una media hora.
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